passivhaus

Passivhaus es un término alemán que se traduce como “casa pasiva”. Se trata de viviendas de alta eficiencia energética, que consumen hasta un 90% menos de energía que las tradicionales y cuyo proceso de diseño y ejecución se basa en cinco principios básicos: el llamado estándar passivhaus.

Foto de portada: Villa Moraira, un proyecto de Dicam Group y primera vivienda en obtener la calificación Passivhaus en la Comunidad Valenciana

El estándar passivhaus nació en Alemania a finales de los años 80 cuando los profesores Adamson y Feist definen sus parámetros. El primer edificio passivhaus se ejecutó en 1991, en la ciudad alemana de Darmstadt. Monitorizado desde entonces, continúa manteniendo su excelencia energética. Años más tarde, Feist fundó el Passivhaus Institut en esa misma ciudad.

Desde entonces se han construido más de 25.000 edificios bajo el estándar passivhaus, que se ha extendido rápidamente por el mundo. Actualmente el Passivhaus Institut certifica materiales, productos, edificios e incluso profesionales que cumplen con el estándar. En España existen 124 edificios certificados. En la Comunidad Valenciana hay tres. Y Sollana, en Valencia, cuenta con el primer edificio de oficinas certificado de España.

oficinas passivhaus

Un edificio con certificación passivhaus debe cumplir unos valores máximos respecto a la demanda de energía de la calefacción, de refrigeración, de energía primaria y de hermeticidad. Cumple por tanto con las exigencias europeas relativas a los edificios de consumo de energía casi nulo. La directiva europea 2010/31 exige que todos los nuevos edificios públicos sean de consumo casi nulo a partir del 1 de enero de 2019 y el resto de los nuevos inmuebles, sin excepción, lo sean a partir del 1 de enero de 2021.

Principios básicos

El estándar passivhaus intenta reducir las pérdidas de energía, aumentando el aislamiento, aprovechando la energía del sol y controlando rigurosamente la estanqueidad y la calidad del aire interior de la vivienda. Los cinco principios básicos en los que se basa el diseño y ejecución de un edificio o una vivienda passivhaus son:

  • Aislamiento térmico adecuado de la envolvente, fachadas, cubierta y solera, que dependiendo del clima optimizará su espesor.
  • Carpintería de altas prestaciones térmicas: Los huecos son el punto débil de la envolvente, por lo que el diseño debe contemplar su ubicación con una adecuada orientación, de forma que la luz solar las caliente en invierno y no en verano. Las carpinterías tienen doble o triple acristalamiento con gas inerte entre vidrios, perfiles de alta eficiencia y herrajes que garanticen la máxima hermeticidad.
  • Minimizar el valor de los puentes térmicos: esquinas, ejes, perfiles, juntas… pueden producir pérdidas de calor o frío y las temperaturas de esas zonas suelen ser inferiores a las del resto de la envolvente, propiciando condensaciones y moho. La construcción sin puentes térmicos pasa por no interrumpir la capa de aislamiento o usar un material de resistencia térmica mayor si tuviera que interrumpirse, además de cuidar el correcto sellado de las juntas entre elementos constructivos.
  • Hermeticidad al aire de la envolvente: no debe existir ninguna fuga de aire en ventanas, puertas, fachadas o techos. La hermeticidad puede  medirse con una prueba de presión.
  • Ventilación mecánica con recuperación de calor: sistemas de ventilación controlada que garanticen un aire interior saludable, sin perder el frío o el calor interior.
passivhaus

Passivhaus en España

En España la Plataforma de Edificación Passivhaus (PEP) es una asociación sin ánimo de lucro dedicada a promover el estándar. PEP detalla cómo “passivhaus combina un elevado confort interior con un consumo de energía muy bajo y un precio asequible”.

Por su parte el Consorcio Passivhaus es una asociación de empresas con productos y materiales certificados por el Passivhaus Institut. Según explica el Consorcio la suma de los cinco principios básicos proporciona gran confort y salud a todos los habitantes de la casa y un ahorro energético significativo”.

Madera y passivhaus

La madera es un excelente aliado de la casa pasiva. Si bien es cierto que passivhaus no recomienda específicamente ningún material en concreto, sino el cumplimiento de unos objetivos, las características de la madera la llevan a la excelencia en passivhaus. La madera es un material natural, con baja conductividad térmica, posee una alta capacidad de regulación de la humedad, es un excelente aislante térmico y acústico y permite la hermeticidad, especialmente los tableros estructurales. Pero además, al ser el único material capaz de fijar CO2 al medio ambiente, su impacto ambiental se sitúa en valores positivos, es decir, no solo no contamina, sino que mejora su entorno.

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